El valle de Tehuacán está en una zona árida/semiárida del centro sur de México, entre los estados de Oaxaca y Puebla. Posee en sus ecosistemas y paisajes una gran diversidad; hay más de 3,000 especies de plantas vasculares, de las cuales el 10% son endémicas.

La ocupación humana es muy antigua, tiene más de 14,000 años, construyendo un paisaje diverso y productivo, uno de los más notable de Mesoamérica. Domesticaron numerosas especies de plantas, crearon un sistema de irrigación tecnológicamente complejo y eficiente para llevar a cabo el riego de los cultivos. Desarrollaron patrones de ocupación del territorio sustentados en una extraordinaria organización político y social como atestigua el surgimiento de las lenguas proto-otomangues que dieron lugar a la familia lingüística más antigua y diversificada del continente americano.

La zona designada como Patrimonio fue designada previamente como Reserva de Biosfera Tehuacán-Cuicatlán incluida en la Red Mundial de Reservas de la Biosfera del Programa MaB de la propia UNESCO en 2012. Es un área con una superficie total de 490,186 hectáreas, 141,781 hectáreas de zona núcleo y 348,405 hectáreas de la zona de amortiguamiento. Este logro excepcional se debe al trabajo conjunto de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP-SEMARNAT), del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH-Secretaría de Cultura), de los expertos e Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), apoyados por el gobierno de los estados de Oaxaca y Puebla y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).